Sabemos que hay muchos mitos acerca de la elaboración y cocción adecuada de la pasta. Aquí os proponemos una serie de normas y consejos para una eficaz cocción
PASTA. Elija una pasta de sémola de trigo duro 100% italiana, preferiblemente trafilada al bronce
AGUA. La proporción entre agua y pasta debe ser de 10: 1, es decir, por cada 100 gramos de pasta se debe calcular 1 litro de agua. Otro consejo importante es no llenar la olla con agua hasta el borde: para evitar que el líquido se derrame durante la cocción, llénelo con agua hasta 2/3 de su capacidad.
UTENSILIOS DE COCCIÓN. Elija la sartén en función de la cantidad de agua necesaria y el formato de la pasta: para pastas cortas, una cacerola grande estará bien, mientras que para los espaguetis elija una cacerola con bordes altos.
TAPAS. La olla debe cubrirse con la tapa mientras hierve el agua: de esta manera, hervirá primero. Al tirar la pasta, recuerde quitar la tapa: la olla debe mantenerse descubierta.
SAL GRUESA.  Debe agregarse sal solo cuando hierva el agua. La adición de sal gruesa del agua fría no solo retrasa alcanzar los 100 ° C sino que también puede dejar un regusto ferroso para la pasta. La dosis general recomendada de sal es de 7 g por 100 g de pasta
COCCIÓN. Después de poner la pasta, el agua debe seguir hirviendo enérgicamente.
MEZCLADO. La pasta se debe revolver con frecuencia durante la cocción para evitar que se pegue.
TIEMPOS. Pasta al dente: respete los tiempos indicados en el paquete.
COCINAR PASTA AL DIENTES. Es un error muy grande poner agua fría al final de la cocción para bloquer la cocción! Necesita repectar el tiempo de cocción o sacarla un minutos antes. –> Consejos Scolapasta: es aconsejable escurrir la pasta con un colador y poner la pasta directamente en el sarten con la salsa: de esta manera, una parte del agua de cocción se une a la salsa y nos permite evitar exagerar con las dosis de aceite.
SALSA. La salsa debe elegirse de acuerdo con el formato de la pasta y la pasta debe echarse en la salsa antes de servir. Pasta larga? Elija salsas líquidas y cremosas. ¿Pasta corta y mediana? Va bien con más salsas con cuerpo (mejor con “rayas” para absorber la salsa). Pasta en espiral? Excelente con salsa de tomate.
QUESO. ¿Te gusta terminar la pasta con queso? ¡Agréguelo solo después de que la pasta se mezcle con la salsa, al final su cada plato!